En FHECOR entendemos el diseño de un puente como algo integral y sólidamente implantado en el territorio. Concebimos nuestras obras no como piezas abstractas, sino como el resultado de la interacción de la técnica con el paisaje, tanto físico como social. Porque los puentes que diseñamos pasan a formar parte del paisaje cultural y, por lo tanto, tenemos que proyectarlos con la responsabilidad que supone la huella permanente que dejará nuestra obra en la calidad de vida de los ciudadanos de ahora y en las generaciones venideras.
Nuestras obras tienen que ser sostenibles, en toda la extensión del concepto de sostenibilidad tan justamente de moda. Para eso tienen que tener un diseño con vocación de intemporalidad, no dependiente de una moda, de forma que sean percibidas como válidas tanto ahora como al final de su vida útil. En ese sentido, procuramos en nuestros proyectos que el diseño esté pensado para asegurar la mínima degradación de los materiales, elegidos, a su vez, junto con las formas y los detalles teniendo también en cuenta el mínimo mantenimiento compatible con dicha vida útil.