El subterráneo está formado por dos túneles gemelos independientes, con dos carriles de circulación por sentido conectados por salidas de emergencia cada 100 metros
El nuevo subterráneo mide 500 metros de largo y 18 de ancho. Tiene doble sentido, cada uno con dos carriles por sentido.
La construcción de este paso inferior ha supuesto la demolición del scalextric que desde 1969 atravesaba Cuatro Caminos. El cual ha tenido que desmontarse poco a poco, llegándose a quitar hasta 105 piezas de 25 toneladas cada una.
Las bocas de entrada y salida del nuevo túnel están en los mismos puntos en los que antes arrancaba y terminaba el scalextric la avenida Reina Victoria y la calle Raimundo Fernández Villaverde. Por el subterráneo está previsto que circulen cada día 80.000 vehículos.
La excavación del túnel ha sido una tarea complicada, ya que el subsuelo de la glorieta está plagado de otras instalaciones dos líneas de Metro muy cercanas a la superficie (la 1 y la 2), otra más en profundidad (la 6), tuberías de agua, luz y electricidad y varios colectores de saneamiento. De hecho, los trabajos de excavación obligaron en noviembre a cortar durante cinco días la línea 1 de Metro, ya que la distancia entre esta línea y el nuevo túnel apenas es de dos metros.