El presidente de Expoagua, Rogque Gistau, dice que en ningún otro edificio de España se ha efectuado un pilotaje tan hondo.
La tecnología más avanzada verifica que los pilotes podrán soportar 7.000 toneladas.
En nuestro país no hay ningún otro edificio cuyo pilotaje alcance tanta profundidad como la del pabellón puente" Son palabras del presidente de Expoagua, Roque Gistau, que ha hecho traer desde Inglaterra una tecnología específica, la "célula de Osterberg" para verificar la cimentación de esta peculiar obra de ingeniería diseño de la arquitecta Zaha Hadid.
Su intención ha sido la de asegurar que los pilotes centrales metidos hasta 72,5 metros de profundidad en el lecho del erío sean capaces de soportar las 7.000 toneladas de peso de esta colosal estructura de acero con forma de gladiolo que tras la Expo permanecerá sobre el Ebro como un barco suspendido.
El jefe de área de Infraestructuras de la EXPO, Miguel Ángel Soria, corroboró "el record de hondura que hemos alcanzado con la cimentación del pabellón puente, que empezó en marzo y que ya está terminada". Recordó que ha sido una obra muy compleja que el ciudadano no percibe pero que resulta fundamental para asentar bien los cimientos de uno de los edificios más caros y emblemáticos de la muestra internacional.
Gistau abundó también en la gran dificultad técnica que ha supuesto cimentar este edificio, máxime al contar con que hay agua circulando por dentro del meandro que va llevándose la arena. Y añadió que los problemas no acaban con la cimentación sino que continuarán en la estructura ya que "el pabellón puente funcionará como si fuese un barco de acero apoyado en tres columnas".
Por otra parte el ingeniero Guillermo Capellán del equipo de Arenas y Asociados, que construye el puente del Tercer Milenio en Zaragoza, con un pilotaje de hasta 52 metros de profundidad, destacó también que en España para la construcción de puentes lo máximo que se ha bajado ha sido una media de 50 metros: "Desde luego, la Expo ha querido garantizar bajando hasta 72,5 , una buen a cimentación para el pabellón puente y además testar su capacidad de resistencia con un sistema especial que han traído de Inglaterra."
A finales de julio, especialistas de la empresa Loadtest Europa, con sede en Londres y encargada de realizar test de carga en las grandes obras públicas, estuvieron en el meandro de Ranillas para comprobar la fortaleza de los pilotes centrales del pabellón puente de 270 m de longitud.
Aunque sus cimientos se apoyaran en 22 pilotes, son 10 de ellos los instalados en la isleta central sobre el Ebro, los que soportan la mitad de la carga de esta estructura que empezará a construirse en breve, Roque Gistau explicó que las cargas en el apoyo central del puente son muy altas y , por lo tanto, no era suficiente hacer pilotes que soportaran la carga por rozamiento, sino buscar el firme". El resto de los pilotes se repartencuatro entre la margen derecha del Ebro y ocho más en la margen izquierda.
Fuentes de Expoagua explicaron que se ha tenido que traer una máquina de pilotaje especial para poder meter estas columnas que soportan la estructura hasta más de 70 m de profundidad sobre una base compacta y dura de yesos. Roque Gistau explicó que los pilotes enterrados de dos metros de diámetro "se han hecho con una camisa o envoltorio que protege el encofrado del agujero para que no se caigan las paredes, que son muy inestables". Sobre ellos van una placa completa, llamado encepado, y encima el pabellón puente, una vez que empiece su construcción, adjudicada en la comisión ejecutiva de Expoagua del pasado 17 de julio, a Dragados y Urssa.
Arranca la construcción
En este sentido, el jefe del área de Infraestructuras de la Expo, Miguel Ángel Soria, adelantó que está a punto de comenzar la construcción de la estructura del pabellón puente, que en la margen derecha tendrá menos anchura, con cinco metros, para ir ensanchándose hasta alcanzar los 30 metros en la margen izquierda, ya en el recinto Expo.
Por su parte, el director de Construcción, Eduardo Ruiz de Termiño, describió los trabajos como si se tratase de construir un "tubo a dos tercios de la margen derecha y uno de la margen izquierda". La isleta construida por Dragados para poder cimentar habrá que unirla con una plataforma que permitirá desarrollar las obras de la estructura del pabellón puente, que empezarán en breve y se prolongarán hasta mayo de 2008. En Febrero de este año, según el calendario de Expoagua comenzará la instalación de contenidos de la exposición temática "Agua, recurso escaso" con lo que se convertirá en el único puente habilitado en España y uno de los pocos que existen en el mundo con estas características. Su carácter diferencial fue uno de los motivos que condicionó la decisión del jurado Expoagua al elegirlo entre los 41 proyectos presentados.
Miguel Ángel Soria apuntó también la diferencia entre las técnicas constructivas del puente del Tercer Milenio y el pabellón puente. Mientras que el primero es un puente empujado sobre el Ebro, el segundo es un puente lanzado, lo que quiere decir que "su estructura se construirá por piezas que se irán uniendo en una de las orillas y cuando el tubo de acero sobrepase ya el cauce, justo para que no cabecee, se enganchará mediante unos cables y se lanzará hasta el apoyo central."
El jefe del área de Infraestructuras de la Expo manifestó que las obras, en general, van a buen ritmo, aunque en agosto se han ralentizado un poco y, sobre este punto, comentó que "diciembre es un mes que hay que apurar al máximo y no podemos perder".
En este momento, están trabajando en Ranillas unos quinientos operarios, la mayoría entregados a labores de ferralla y hormigonado. Miguel Ángel Soria puntualiza que "será a final de año o comienzos del años que viene cuando hará falta mucho más persona de instalaciones".